saber escuchar

Hoy en la larde, mientras trataba de encontrar un regalo para mi madre, ese regalo que tiene que ser especial por que ella es especial, encontré a una persona. La había visto antes, por que es amiga de una amigo, pero jamás había entablado una conversación más allá de un hola, ella era una mujer blanca, de pelo castaño claro, una mira tan dulce como el azúcar, su bellaza no nacía de su físico si no de mas adentro, de más allá de su piel, provenía de su alma, de lo más oculto de su corazón, es algo que solos algunas personas pueden ver, pero ella tenia toda esa belleza que yo siempre había buscado, hablamos por cerca de dos horas, me contó de su vida de sus sueños, pero dentro de mi percibía su tristeza, sabia que le habían hecho mucho daño y que su corazón aun tenias las huellas de una batalla perdida, las cicatrices eran visibles desde donde yo estaba, trate de entrar con mi mente a esas heridas, pero la respuesta a eso fue más de lo que yo esperaba, su corazón me contó que el le hablaba, que siempre trataba de decirle cosas, le mandaba señales, pero esas oraciones llegaban a su mente y morían ahí, se perdían y todo quedaba en la nada, su mente mataba todo. Yo le hice ese comentario, le dije que su corazón le hablaba y que su mente distorsionaba todo, ella mi miro sorprendida por lo que acababa de escuchar, bajo la mirada, sus ojos rojos miraron hacia este personaje y con ternura me pregunta, -¿Cómo lo sabes?... ¿Quién te dio el premiso de entrar a mi interior?... la respuesta fue inmediata… -Nadie me ha dado el permiso pero yo lo capté. Quizás tú me lo dijiste, yo no quería saber mucho más de ti, pero tu corazón me hablo y yo lo escuche. Después de eso la conversación cambio pero fue más intensa y sincera, más de amigos, ella logro comprender yo no tenia la intención de hacer daño, solo quería ser su amigo y su corazón así lo había captado desde un principio, pero lo mejor de todo es que me di cuenta que por fin ella después de mucho tiempo había logrado escuchar a su corazón y cambiar su postura hacia mi, después de eso todo fue más lindo y amigable.

Ahora me pregunto… ¿Nos damos el tiempo para escuchar a nuestro corazón, o si siempre estamos escuchando a nuestra mente?... ¿Quien es mas amigo de nosotros, nuestro corazón o nuestra mente?... yo aun no encuentro la respuesta, solo sé que desde ahora escucharé mejor a mi corazón, será el que me guié por un tiempo.